El objetivo de dichas hechiceras era poner fin a la guerra que se libraba entre los Reinos del Norte y Nilfgaard y por supuesto seguir influyendo con el poder de la magia en el destino de todo el mundo.
Las elegidas para formar parte de la Logia fueron la ya mencionada Phillippa Eilhart, Keyra Metz, Triss Merigold, Margarita Laux-Antille, Sabrina Glevissig, Sheala de Tancarville, Francesca Findanbair, Assire Var Anahid y Fringilla Vigo, estas dos últimas eran nilfgaardianas.
La Logia ha seguido activa hasta nuestros días, reuniéndose en secreto y organizando el destino del mundo, o por lo menos intentándolo. Su lugar de reunión es el castillo de Montecalvo, base de operaciones de la misma Phillippa Eilhart.
Durante algunas reuniones, cuando las hechiceras no pueden estar presentes físicamente, lo hacen a base de hechizos.
Triss Merigold asiste y forma parte activa de estas reuniones y de las decisiones, si bien es cierto que todo lo intenta hacer a favor de sus amigos.
La idea de Filippa era hacer que Yennefer perteneciera también a la Logia, era la más joven pero también muy poderosa, además de ser la madre adoptiva de Ciri, la niña elegida y heredera de Larra Dorren, lo cual era una pieza importante para el juego que se traían entre manos las hechiceras. Pero Yennefer declinó la oferta y no llegó a ser parte de la Logia.
La Logia fue culpada de los asesinatos de Reyes cometidos durante el comienzo de la segunda invasión de Nilfgaard. Letho asesinó reyes norteños para que los Reinos no se volvieran a unir contra el Imperio de Nilfgaard y así avanzar en su segunda invasión.
Falta una integrante muy importante y es Ida Emean aep Sivney (una Aen Saevherne como Avallac'h) que en teoría era tal vez hasta superior a Phillippa Eilhart en cuanto a conocimientos mágicos.
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